1. Especialización: puedes acudir directamente a los médicos especialistas. De esta manera, tienes cubierto cualquier problema de salud y te evitas preocupaciones.
2. Agilidad: se acabaron las listas de espera. Vas a gozar de atención personalizada y sin perder tiempo.
3. Flexibilidad: tendrás libertad de elección de médico. Con un seguro de salud dispones de flexibilidad para elegir al profesional que te merezca más confianza.
4. Innovación: en los centros privados encontrarás las más modernas tecnologías al servicio de tu salud.
5. Prevención: un seguro de salud también es la mejor alternativa para prevenir posibles males mientras estamos sanos, no solo para curarnos cuando estamos enfermos.
6. Facilidad: podrás realizar cómodamente todo tipo de gestiones (peticiones de cita, autorizaciones de pruebas, consultas al servicio de atención al cliente…), en línea, en las sucursales de la aseguradora o por teléfono.
7. Profesionalidad: sin desmerecer a los profesionales de la sanidad pública, los más prestigiosos suelen trabajar también (o únicamente) en la sanidad privada. Serás atendido por los mejores médicos.
8. Podrás solicitar una segunda opinión médica siempre que lo consideres conveniente. Ya lo sabes: ¡con la salud no se juega!
9. Globalidad: serás atendido en tu propio idioma cuando estés de viaje en cualquier lugar del mundo y además todas las gestiones necesarias (hotel, gastos de repatriación…) quedarán cubiertas.
10. Confianza: podrás confiar plenamente en una aseguradora que estará a tu lado en los momentos más difíciles.
«El seguro de salud para dummies, de Josep Santacreu»
Libro El seguro de salud para dummies
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